Camino con Dios

Escrito por Eliezer Pérez

"Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios"

Génesis 5:24

Cuando leemos en las primeras páginas de la Biblia nos encontramos con la descendencia de Set hijo de Adán en el capítulo 5 del libro de Génesis. En esta lista de descendientes del primer hombre, siempre nos asombramos por los años que vivió Matusalén que fueron 969 años. Pero si miramos unos versículos más atrás nos enteramos que Matusalén fue hijo de Enoc.

Enoc solo estuvo de paso 365 años, la mitad de lo que vivió su hijo Matusalén. Pero pese a que estuvo solo 365 años en este mundo hay algo todavía más impactante que lo hace especial.

Génesis 5:21-24 dice:“Vivió Enoc sesenta y cinco años, y engendró a Matusalén. Y caminó Enoc con Dios, después que engendró a Matusalén, trescientos años, y engendró hijos e hijas. Y fueron todos los días de Enoc trescientos sesenta y cinco años. Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios” (RVR1960)

Usted podrá ver que la gran mayoría vivió setecientos años o más. Mientras que Enoc solo duro en la tierra trescientos sesenta y cinco años. Pero esos pocos años en comparación a los demás, la Biblia dice textualmente que él los vivió “caminando con Dios”.

Caminar es sinónimo de Andar. Y caminar es lo mismo que andar junto con Dios. Observe que no dice: Caminar POR Dios sino caminar CON Dios. Pues, cuando caminamos solos es fácil distraernos, pero cuando estamos acompañados nuestra atención está en disfrutar con nuestro acompañante.

Caminar con Dios es estar de acuerdo con Dios. El libro de Amós 3:3 dice: “¿Andarán dos juntos, si no estuvieren de acuerdo?”. Y estar de acuerdo significa aceptar lo que Dios dice en su Santa Palabra. Y en ninguna manera podemos nosotros creer que somos más astutos que Dios llevándolo por el camino que a nosotros más nos gusta sin que Él se de cuenta.

Jeremías 10:23 dice: “Conozco, oh Jehová, que el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina es el ordenar sus pasos.” Como cristianos debemos reconocer que Dios tiene normas fijas para la familia, el trabajo, (Colosenses 3:18- 4:1), las amistades (1 de Corintios 15:33), etc.

2 de Timoteo 3:15-17. Nos dice que si comprendemos que Dios nos dirige por medio de Su Palabra inspirada podemos llegar no solo a ser aptos para toda buena obra, sino también “sabios”. Y un sabio es aquel que sabe por donde esta caminando.

En el Nuevo Testamento “caminar con Dios” es “andar en el Espíritu”. Y los que andan en el Espíritu han crucificado los deseos de la carne (Romanos 8). Y son libres de la esclavitud de este mundo y no hay ninguna condenación para ellos. Gálatas 5:22 al 25 dice: “Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu.”

¿En este momento está usted caminando con Dios? Recuerde la historia de Enoc. El invirtió sus días en la manera adecuada, poco se habla de él. Pero lo que hizo ha quedado para la historia. Dios le llevo sin ver la Muerte. Y ese fue el fruto de caminar con Dios.

Enoc es un reflejo de lo que seremos los cristianos si Cristo viene Hoy. No duramos la misma cantidad de años que Matusalén como para seguir pensando que tenemos todavía mucha vida por recorrer. En cambio Salmos 90:10 dice: "Los días de nuestra edad son setenta años; Y si en los más robustos son ochenta años, con todo, su fortaleza es molestia y trabajo, porque pronto pasan, y volamos."

Entonces No importa cuánto tiempo de vida podamos tener y cuantos cumpleaños Dios nos permita vivir. Lo más importante ahora es “Caminar con Dios”. ¡Dios le bendiga!

Aprendamos más de Dios

¿Sabia usted que Dios no esta lejos de nosotros?

Mire a su alrededor: las plantas, los animales, los seres humanos, el cielo, la tierra, el agua, las estrellas. Todo es muy complejo como ser hecho de la nada y ni toda una vida es suficiente para estudiarlo en su totalidad.

De hecho incluso la ciencia esta revelando, algunas cosas que ya la Palabra de Dios a mencionado hace miles de años. Sin embargo, Dios no desea que solo conozcamos que Él existe. En cambio desea la salvación de nuestras almas y llevarnos por una vida pura, digna y sobre todo que experimentemos la verdadera Felicidad que solo su Hijo Jesucristo nos da.